Introducción a la mecánica cuántica IV: El efecto túnel

Continuando con la línea de posts divulgativos, hoy vamos a tratar un novedoso aspecto de la mecánica cuántica. Para ello es necesario familiarizarnos antes con la idea de "potencial". Muy a menudo hablamos de que tal o cual persona es "un asesino en potencia" (bueno, esto último no muy a menudo xD); cuando decimos esto, nos estamos refiriendo a que esa persona tiene la potencialidad de realizar un asesinato (lo lleve a cabo o no).

De igual manera, decimos que los sistemas físicos tienen la capacidad de realizar un trabajo (una fuerza) en potencia. Como símil, podemos pensar en el campo gravitatorio, cuanto más alto esté una mas, con más fuerza caerá y, por tanto, mayor es su "potencialidad". Es decir, en el caso del campo gravitatorio, un cuerpo tiene más energía potencial cuanto más alto esté.

Matemáticamente (que es como se deben hacer las cosas), decimos que las fuerzas derivan de un potencial y, por comodidad, solemos trabajar con el campo madre, el potencial. Creamos así campos de potencial para las distintas fuerzas (la gravitatoria, la electromagnética, la nuclear fuerte, etc...). Para familiarizarnos un poco más con la idea de potencial, podemos imaginar que nos tiramos de cabeza contra una pared. En tal caso, no sufriremos fuerza hasta que, de repente, nos chocamos contra la susodicha pared. Del experimento extraemos que el potencial será nulo en todo instante, hasta el contacto con la pared (y también extraemos un chichón). El dibujo del potencial sería el que acompaña a estas líneas; nosotros estaríamos en el interior, correríamos y sentiríamos, de golpe, una energía infinita.
Bien... Supongamos ahora que nuestro pozo de potencial no es de paredes infinitas, si no que nos encontramos con un pozo de una cierta altura. Esto es lo que conocemos como un "bache"; si llevamos suficiente energía y el bache es lo suficientemente pequeño, ni lo notamos. Si por contra el tamaño del bache es comparable a nosotros, lo vemos como una especie de pared (podríamos intentar saltarnos si lleváramos suficiente energía). Además, si el bache es lo suficientemente elevado, estaremos frente a un muro como el de antes.

Con esta sencilla idea en la cabeza, vamos a ver qué ocurre en el mundo cuántico:

Las trayectorias de los entes cuánticos están descritas por una cantidad conocida como "función de onda", que suele ser función de la posición (r) y del tiempo (t); llamaremos a esta cantidad Ψ. Esta cantidad no tiene un sentido físico inmediato (no... no son exactamente las trayectorias). Y esto se debe a que las funciones Ψ son, en general, complejas (es decir, no son cantidades reales, sino con componente imaginaria). Por lo tanto, la cantidad con verdadero sentido físico es su cuadrado (su cuadrado complejo), cantidad que se denota como |Ψ|, y que refleja la probabilidad de encontrar al ente cuántico en una posición (x) y tiempo (t) determinados.

Por lo tanto, lo que tendremos es una distribución de probabilidad cuyo cuadrado nos muestra la probabilidad de encontrar al ente en un lugar y un tiempo. En la naturaleza, y en los casos reales (en los que no existen paredes infinitas), estas distribuciones de probabilidad son continuas y derivables. Esto quiere decir que no sufren caídas bruscas, pueden caer rápidamente, pero no "instantáneamente". Esto es algo que no nos pasa a nosotros (que no somos objetos cuánticos). Nuestra probabilidad de estar dentro del muro cuando nos tiramos contra él es cero; ¡pero no es así para un ente cuántico!. ¡Esta revolucionaria afirmación quiere decir que un ente cuántico puede atravesar una pared de potencial!


Como vemos en la imagen anterior, la probabilidad de encontrar a la partícula al otro lado del muro decae muy rápido, pero no se anula. Este fenómeno es conocido como "efecto túnel", y está detrás de la práctica totalidad de la industria electrónica moderna.


Sobre la monarquía y la casa real.

La siguiente información no está manipulada; es de público acceso en la web: http://www.casareal.es/laCasa/laCasa-ides-idweb.html

I. PRESUPUESTO ANUAL

De acuerdo con lo dispuesto en los artículos 65 y 134 de la Constitución, las Cortes Generales aprueban cada año la Ley de Presupuestos Generales del Estado, en cuya Sección primera se establece para cada ejercicio -a propuesta del Gobierno- una cantidad global para el organismo constitucional denominado "Casa de S.M. el Rey".

Esta cantidad global (..) viene siendo normalmente objeto de una variación anual en línea con la aplicada a los restantes organismos constitucionales. A la vista de las actuales exigencias de austeridad presupuestaria, la Casa de S.M. el Rey ha solicitado que la asignación global para el ejercicio de 2010 se mantenga en el mismo nivel de 2009.

Según la Constitución, corresponde a S.M. el Rey distribuir libremente dicho importe, destinado a subvenir los gastos de funcionamiento y de personal a cargo directo de la Casa de S.M. el Rey, así como también al sostenimiento de Su Familia. La finalidad de esta asignación es asegurar que la Jefatura del Estado disponga de una dotación presupuestaria suficiente para que el Jefe del Estado pueda desarrollar su labor con la independencia inherente a sus funciones constitucionales.

Con esta cantidad anual la Casa de S.M. el Rey hace frente a sus obligaciones económicas más directas que no son asumidas por otros organismos del Estado (1): retribuciones, cuotas y prestaciones sociales del personal de alta dirección, de dirección y laboral a cargo de la Casa; gastos de funcionamiento, como material de oficina; determinados suministros; gastos de protocolo y de representación -almuerzos, cenas, recepciones-; dietas y gastos de transporte; adquisiciones de material diverso para el funcionamiento de las Unidades, etc...

Al igual que ocurre en otros órganos constitucionales -como el Congreso y Senado- y en otros países de nuestro entorno -tanto monarquías como repúblicas-, la asignación global de la Casa de S.M. el Rey no está sometida al Tribunal de Cuentas.

(…)

2006

2007

2008

2009

2010

Dotación Casa de S.M. el Rey (en miles de euros)

8.048,51

8.289,97

8.663,02

8.896,92

8.896,92 (*)

(*) La Casa de S.M. el Rey, de acuerdo con lo más arriba indicado, ha solicitado que la asignación global para el ejercicio de 2010 se mantenga al mismo nivel que en 2009.

Todo un ejemplo de austeridad… ¿Cuánto dinero necesitan para sus yates, cenas, material de oficina..? Gastan 8.896.920€ en grapas?, ¿Cómo demonios se puede ser monárquico?. Y lo gracioso es que dicen que le mantengan el mismo presupuesto "como ejemplo de austeridad"... pero, mancha de sinvergüenzas, si cada año os lo aumentan!!! ¿El ejercicio de austeridad es no aumentarse el sueldo?... Vaya... ¡qué solidario!

Pero qué requetebueno es nuestro rey, leñe!.

Y tan campechano!

Introducción a la mecánica cuántica III: Dimensiones

En el último post, dejábamos la puerta abierta a la posibilidad de dimensiones adicionales (que le son accesibles a las partículas cuánticas, pero que nos son inaccesibles a nosotros). Con este artificio se pretende explicar la posibilidad de que un electrón esté en dos lugares a la vez (como pasaba en la doble rendija).

Cuando estudiamos mecánica cuántica tenemos que tener en cuenta que la física no es más que un modelo matemático de la realidad. Hecho por el hombre. La realidad en sí es incognoscible, sólo podemos intentar estudiarla usando nuestro pensamiento... algunos pretenden ver aquí a Dios; a lo que yo respondo: ¿si existe Dios, para qué narices voy a estudiar mecánica cuántica?. Pero la estudio. Y funciona.

La posibilidad multidimensional es una técnica matemática que simplifica de sobremanera el cálculo. En el caso de la relatividad, se habla del tiempo como una cuarta dimensión. Cuando hablamos de dimensiones, no tienen por qué ser "dimensiones espaciales"; porque nuestra concepción del espacio está limitada a lo que nuestros sentidos pueden percibir... y, aunque esto parece ya más un post de metafísica, esa es la realidad. Y después de todo, la buena metafísica es, de echo, física.

Un ejemplo de lo que acabo de comentar se da en el siguiente video:


Llegado a este punto, procedo a explicar el propósito de este post: las dimensiones adicionales son un modelo matemático; y no hay que ser tan sensacionalista a la hora de hablar sobre dimensiones, teleportación, universos paralelos... El camino correcto es el estudio de las posibilidades dentro de las leyes conocidas de que se den estos fenómenos. Hoy por hoy, la física no prohibe la existencia de más dimensiones. Pero sí exige que estas estén muy curvadas (esto, para mucho más adelante), lo que imposibilita la presencia de entes distintos de los cuánticos.

En otras palabras, el comecocos del video no podría "pasar a la tercera dimensión". Es por eso mismo que nosotros no podemos acceder a las dimensiones a las que sí tiene acceso un electrón... porque nosotros no somos entes cuánticos.

Introducción a la mecánica cuántica II: La dualidad onda/corpúsculo

Visto que a mi niña le gustó el post anterior, me he animado a publicar el siguiente pasito en la teoría cuántica. Este punto es bien difícil de entender... de hecho, cuando se le pregunta a un físico ¿qué es la mecánica cuántica?, solemos responder que es un sistema para ligar con becarias que creen que la entendemos (no es mi caso, yo estoy casado).

Como adelantamos en el post anterior, la mecánica cuántica es probabilística y evalúa todos los posibles estados de un sistema; todos a la vez. El caso extremo de esta afirmación es la doble rendija (por cierto, es el primer chiste de TBBT). Supongamos que "disparamos" una partícula contra una doble rendija... de acuerdo con las leyes de la cuántica la partícula puede atravesar una rendija, la otra, ninguna... o las dos a la vez.

Y punto.

Además, y como dijimos también, el hecho de medir nos altera la realidad bajo estudio. En el siguiente video se ilustra perfectamente lo que explico:


Esto parece dejar la posibilidad abierta a la existencia de "universos paralelos", "presencia del mismo objeto en dos sitios a la vez"... y ese tipo de chorradas.

Y aquí vengo yo a desmontar el entuerto.

La dualidad onda/corpúsculo es real, tanto es así que a los fotones los caracterizamos de una u otra forma según nos simplifique más o menos el problema. La longitud de onda asociada a una partícula es proporcional a la constante de Planck. Este parámetro, que llamaremos h, es ridículamente pequeño: h = 6.26·10^(-34) J·s Entendiendo de órdenes de magnitud, podemos ver que esto es una auténtica porquería de constante. Planck estableció la relación:

m·v = p = h/λ

m=masa de la partícula
v=velocidad
p=cantidad de movimiento (m·v)
λ=longitud de onda

Como vemos, operando: λ=h/(m·v) Si h es pequeñísima, y además la dividimos por la masa del objeto... la longitud de onda asociada a un objeto de peso un poco superior al electrón se hace absolutamente despreciable. De hecho, los objetos "masivos" (entendiendo por masivo un átomo, digamos) tienen un comportamiento ondulatorio despreciable.

A escala humana, esta afirmación hace que el comportamiento ondulatorio de las personas sea indetectable. Es decir; no pueden existir universos paralelos ni personas idénticas en lugares distintos... o, de existir, tienen una probabilidad de existencia tan ridícula que queda anulada frente a efectos cuánticos de orden superior.

Ejemplo de memez:


Nota a los señores de REDES: pueden existir más dimensiones que nos sean imperceptibles (aunque tampoco para ponerse en 11, como alguno asegura). Eso no implica la existencia de universos paralelos. Hmm... ya tengo material para otro post =)

Introducción a la mecánica cuántica I: La descripción probabilística

Bueno, vista la cantidad de sandeces que se dicen sobre la mecánica cuántica (en gran medida, por desconocimiento, y en otras por fanfarronería) me he tomado el pequeño objetivo de hacer una linea de posts divulgativos. Aquí tenéis la primera entrega.

La mecánica cuántica tiene dos palabras, aunque suene a estupidez... "mecánica", que hace referencia al modelaje matemático de la dinámica (estado de movimiento) de los entes bajo estudio; y "cuántica", que indica que todas las cantidades intrínsecas a esta disciplina serán múltiplos de una cantidad (se dice que las cantidades están cuantizadas). En primer lugar, la mecánica cuántica renuncia a conocer el estado de movimiento exacto de los entes (es decir, renuncia a conocer posición y velocidad exacta de una partícula) para, en su lugar, hacer una descripción probabilísitica del estado de movimiento de la partícula. Esto, que aparentemente es un mal punto de partida, nos permite solventar ciertas dificultades que veremos más adelante.

La descripción probabilística de un estado (sea o no de movimiento) debe tener en cuenta todos los posibles ensayos de ese estado, modulados por su probabilidad correspondiente. El desempate entre todas las posibilidades se lleva a cabo en el momento de medir. Luego medir altera forzosamente el ente bajo estudio, alterando el resultado y siendo, por tanto, imposible conocer la naturaleza exacta del universo (por el hecho de que lo alteramos al estudiarlo).

Un ejemplo para esto es el "gato de Schröedinger", que es un experimento mental que propone a un gato, encerrado en una caja, con un frasco lleno de veneno. El gato puede o no beber de este frasco, pudiendo estar vivo o muerto (y tendremos que considerar ambas posibilidades a la vez, aunque sabemos que esto duele al pensamiento). Un ejemplo de modificación de la realidad sería que al abrir la caja, rompiéramos el frasco y matáramos al pobre gato... en cuyo caso habría una parte de la realidad (gato vivo) que se nos escapa. Esta y otras "paradojas" ocurren muy a menudo en esta emocionante disciplina física.

Por cierto, y para dejarnos de tonterías, una paradoja es, según la RAE: Idea extraña u opuesta a la común opinión y sentir de las personas. Una paradoja NO ES una imposibilidad física ni un vacío en las leyes del universo.